La misma mierda - Diego Dianderas
LA MISMA MIERDA
estaba en el baño de un bus
no más grande que una cabina telefónica
pero igual de maloliente como un deseo podrido
con vapores colectivos de orina infestando el aire
había entrado de madrugada, en la oscuridad
del silencio que anestesia los párpados itinerantes.
no más grande que una cabina telefónica
pero igual de maloliente como un deseo podrido
con vapores colectivos de orina infestando el aire
había entrado de madrugada, en la oscuridad
del silencio que anestesia los párpados itinerantes.
tenía ganas de fumarme un cigarro
mientras viajaba por la noche
en ese tubo de metal sobre ruedas
me sentí pendejo
estaba contra las reglas
nadie se daría realmente cuenta
una ventana dentro de la apestosa claustrofobia
ventilaba con la velocidad de su camino
se llevaba el humo de mi trasgresión
me dieron ganas de cagar
mis tripas trémulas anunciaban un alud
quizás fue el humo cavilándose por mis entrañas
no lo hice
me dieron ganas de masturbarme
una apestosa intimidad me pervertía
no lo hice
me dieron ganas de apagar el cigarro
renunciar a su placer
mejorar mi salud
no lo hice
me dieron ganas de mirarme al espejo
martirizar mi reflejo con mi propio desdén
lo hice
pensé en la falta de sueño
a pesar de no haber dormido hace días
pensé en el mundial de fútbol
y en las cervezas y en el whiskey y en las mujeres
y sin haber cagado
me di cuenta que era la misma mierda
que todos
mientras viajaba por la noche
en ese tubo de metal sobre ruedas
me sentí pendejo
estaba contra las reglas
nadie se daría realmente cuenta
una ventana dentro de la apestosa claustrofobia
ventilaba con la velocidad de su camino
se llevaba el humo de mi trasgresión
me dieron ganas de cagar
mis tripas trémulas anunciaban un alud
quizás fue el humo cavilándose por mis entrañas
no lo hice
me dieron ganas de masturbarme
una apestosa intimidad me pervertía
no lo hice
me dieron ganas de apagar el cigarro
renunciar a su placer
mejorar mi salud
no lo hice
me dieron ganas de mirarme al espejo
martirizar mi reflejo con mi propio desdén
lo hice
pensé en la falta de sueño
a pesar de no haber dormido hace días
pensé en el mundial de fútbol
y en las cervezas y en el whiskey y en las mujeres
y sin haber cagado
me di cuenta que era la misma mierda
que todos
Diego Dianderas
(Lima)
(Lima)
DIEGO DIANDERAS (Lima, 1989) Licenciado en psicología por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Escribe poesía y toma vino, a veces, al mismo tiempo. Ha colaborado en antologías locales e internacionales, también procura dedicarle tiempo a la dramaturgia. Próximamente publicará su primer poemario.
*Poema incluido en Somos poetas, seámoslo siempre. Estos poetas y esas poetas (Edit. Poetas y Violetas, 2018). El autor tiene cinco poemas en este libro de varias voces. Más info del libro aquí. La obra la encuentras en librería en este enlace o con la editorial escribiendo a poetasyvioletas@gmail.com
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